Plantar los árboles en el mismo día de la recepción o el siguiente y a la misma profundidad que en el contenedor. En ningún caso dejar parte del cepellón expuesto al sol ni enterrar el injerto.
Manejar la planta con cuidado de no desmoronar el cepellón. No pisar o compactar la tierra pero tampoco dejar huecos entre el suelo y el cepellón